La película número 22 en la saga de nuestro espía de MI6 favorito Jaime Unión, digo, James Bond, nos deja con sentimientos encontrados.
La película empieza con una explosión de acción llevada a cabo por una persecución a alta velocidad digna de una escena de Need For Speed: Undercover. Es aquí donde uno se emociona y dice «esta vaina va a estar buena», pero al final se desinfla.
Lo que hace realmente separa esta película del 007 de cualquiera de las otras es su continuidad. Al parecer los productores decidieron hacerla una secuela directa de Casino Royale y ahí estuvo el primer error de una serie. He visto muchas películas de James Bond (no voy a ser pretencioso diciendo que he visto las 22, pero sí más de 12) y puedo contar a Casino Royale entre las mejores tres de la saga. Quantum of Solace está muy lejos de serlo.
Quantum of Solace parece ser una especie de epílogo de su predecesora que no le llega a la cintura. Definitivamente tiene todo lo que una película Bond debe tener: acción, explosiones, persecuciones, armas y mujeres. Al final aún me faltó algo que solo puedo definir como «El momento Bond» que es lo que pienso separa a las películas del 007 de cualquier otra película de espionaje.
Quantum of Solace trata de una organización secreta llamada Quantum que quiere controlar el mundo, y en esta ocasión trata de adueñarse del recurso más importante del planeta: el agua. Esta organización queda en medio de James Bond y su venganza por la muerte de Vesper (Eva Green).
Debo decir que el concepto de esta organización me parece una idea que se pudo desarrollar de una mejor manera, haciéndola un enemigo mucho más grande, pero al pasar de la película los villanos quedan relegados a planos secundarios y pasan de ser una organización súper secreta y peligrosa a un grupo de villanos cualquiera.
Otra cosa que me incomodó un poco es el nuevo recurso de James Bond que posee: ser parkour. Los James Bonds de Sean Connery o Roger Moore de a milagro corrían un poquito y pegaban un par de puñetazos, en cambio el Bond de Daniel Craig lo tienen saltando de aquí pa’ allá, en un momento me pregunté si en realidad no estaba viendo una película del Hombre Araña.
Finalmente vemos a las chicas Bond que en esta ocasión son dos. Camilla Montes, interpretada por la bella actriz ucraniana, Olga Kurylenko, quien quiere vengar a la muerte de su padre, y la refrescante Agente Fields (Gemma Arterton) que descubre que mezclarse con el 007 nunca resulta en algo bueno.
VEREDICTO: Quantum of Solace pasará a la historia como una película de acción más y una de tantas en la saga Bond. Una película regular hasta en su soundtrack, pues la interpretación de Jack White con Alicia Keys pienso no le dio el empuje necesario (la interpretación de la canción la iba a realizar Amy Winehouse, pero como andaba medio «indispuesta» todos sabemos con qué no le dieron play). Aunque está recogiendo bastante dinero alrededor del mundo, no me fascina como fan del 007 que soy. Además nunca me enteré por que el «Solace» en «Quantum», de repente era por el Solazo del desierto ¿quién sabe?
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.